Mientras se carga un megaarchivo alienígena, os escribo desde Peñinilandia...
Y es que el otro día me paso algo sorprendente...
¡una paloma se tropezó delante de mi!
Y yo me quedé pensando si eso era realmente posible, y me estoy riendo desde entonces... (algunos pueden confirmarlo...).
Para que luego digan que yo soy un pato... almenos he encontrado a mi paloma gemela... Lástima que inmediatamente echase a volar y yo no pueda hacer más que seguir tropezándome.
1 comentario:
Mi no poder ver una entrada sin comentarios!!! Entre las patopalomas y las pollopalomas... la ciudad parece una granja...
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